La violencia es el miedo a los ideales de los demás.
Los hombres que no perdonan a las mujeres sus pequeños defectos jamas disfrutaran de sus grandes virtudes.
Lo que se obtiene con la violencia solamente se puede mantener con violencia.
Los hombres creen gustosamente aquello que se acomodan a sus deseos.
Todo el que disfruta cree que lo importante del árbol es el fruto, cuando en realidad es la semilla. He aquí la diferencia entre los que creen y los que disfrutan.
Quien de verdad sabe de que habla, no encuentra razones para levantar la voz.
En general, quienes no tienen nada que decir invierten el mayor tiempo posible en no decir nada.
Si lo que vas decir no es mas bello que el silencio; no lo digas.
Uno es dueño de lo que calla y esclavo de lo que habla.
Existe un lenguaje que va mas allá de las palabras.
Con buenas palabras se puede negociar, pero para poder engrandecer se se requiere buenas obras.
Como las flores hermosas, con color pero sin aromas, son las
dulces palabras para el que no obra de acuerdo con ellas.
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